Caimito como sociedad organizada.

Este blog es un de las herramientas que tienen los habitantes de Caimito para expresarse, lo he puesto al servicio de quienes así lo consideren, lógicamente manteniendo la ecuanimidad y el respeto por los demás y las instituciones.

Ha llegado a mis manos una carta remitida por Rafael Silgado Villalba, hijo de Caimito y dirigida al actual alcalde Lázaro Pinto Herrera, donde le manifiesta la necesidad de reconocer aquellos mecanismos de participación ciudadana establecidas legalmente en Caimito, fundamentadas en la Ley 743 y de las cuales entiendo Rafael es participe en propiciar las mismas y presentar alternativas de desarrollo para las comunidades de Caimito pero parece no haber tenido eco por parte de la Administración municipal.

Publico esta carta solo con el ánimo de que conozcan los alcances de la misma y por el interés que ella genera, teniendo en cuenta que hay herramientas de participación en Caimito que pueden ser utilizadas en beneficio de la comunidad si los fines benévolos,  las conclusiones las saca cada uno de ustedes. Este es el texto de la carta conocida en el día de hoy 13 de Febrero de 2013.

Talentos Desperdiciados

Acogiéndome a un preceptos cristiano puedo decir que Dios a cada uno de nosotros nos dio unos talentos o dones, los cuales deben ser aprovechados para beneficio de quien a Dios los dio; recordemos la parábola de los talentos en el libro de Marcos Capitulo 25 versos del 14 al 30 que termina en el verso 30, pero en el 29 reza “Porque al que tiene, le será dado, y tendrá más; y al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado.”

El Director Cesar Viloria recibiendo el trofeo

Este razonamiento lo traigo acotación porque después de inventariar  las virtudes de los nativos de mi pueblo concluyo que Dios definitivamente y quizás atendiendo la vocación creyente de los Caimiteros que hicieron imagen de San Juan del árbol de caimito y cimentada en  las predicas de los párrocos de las épocas y de Don Ulises Silgado, resolvió seguir dotando de “dones o talentos” de cantores y ejecutores de instrumentos a muchos de los hijos de este municipio.

El Orgullo de Ser Caimitero

Por: Rafael Silgado Villalba.

Hay momentos en la vida en que uno se detiene para hacer un resumen de todo lo bueno y lo malo que he hecho, por lo menos a mi me ha ocurrido, no se si a ustedes, aunque uno siempre trata de hacer todo bien, después de que hace o realiza un sueño o cumple una meta siempre encuentra algo que no lo deja satisfecho del todo porque en algún lado encuentra un vacío y uno dice hubiera podido sido mejor si hubiera  hecho de esta forma o de la otra. Somos honestos y transparentes  en todos los actos de nuestra  vida pero también hay situaciones que lo dejan intranquilo o nos remuerde la conciencia de algo que salió mal aunque no haya sido con intención. Nos  esforzamos por dar una formación buena e integral a los hijos pero siempre hay fallas por malos testimonios o malos ejemplos que uno comete y  uno reflexionea y dice: “carajo lo pude haber hecho mejor”.

Con este análisis personal y otras memorias sobre mi vida,  festejo mis buenas actuaciones pero  me arrepiento de algunas embarradas cometidas, pero en medio de todo lo que si es  claro para mi y me da siempre aliento y nunca me avergüenzo es el hecho de haber nacido en Caimito, de lo cual   me siento orgulloso y lo grito a todo pulmón “me siento orgulloso de ser Caimitero”.  Y si me tocara volver a nacer me gustaría nacer nuevamente en Caimito.

De regreso al pasado

Cuando la nostalgia embarga mi pensamiento ante el recuerdo de eventos  de nuestra niñez, la pasividad del ambiente en que me crié, lo sano que era nuestro pueblo, donde la gente solo se moría de vejez,  aquellas noches de luna llena buscando agua en el pozo de El Pantano o La Ceibita, me acoge un deseo irresistible de regresar a vivir a ese hermoso espectro de niñez donde me crié si las condiciones de esa época persistieran.

Pero el tiempo pasa y las cosas cambian, el mundo evoluciona en ambos sentidos y efectivamente mi terruño no es la excepción, ya no es el mismo hábitat donde se preocupaba uno tanto o más por el vecino que por uno mismo, las prioridades han cambiado, al igual que en la ciudad donde primero soy yo, segundo yo, tercero yo y sobra algo también es para mí.

Tiempos aquellos cuando pasaban los Tofemeros  que venían a vender sus productos a Camito montados en su burro y de paso nos regalaban una yuca, un cafongo, un plátano o cualquier cosa a cambio de nada se desprendían de lo material fácilmente, que agradable esos gestos que más tarde seretribuían cuando en fiestas de toro uno les prestaba el baño para que se bañaran y se quitan el polvo de sus abarcas para  subir al palco o ir a ala corraleja con la mejor pinta y disfrutar su tarde de toros.

Propiciando el Cambio

Este medio nace por  iniciativa propia buscando que el pueblo que me vio nacer tuviese una vitrina modesta, a través de la cual se pueda dar a conocer todas su  maravillas paisajistas, sus valores culturales, la bondad de sus gentes y ante todo la paz que aún conserva  este bello pueblo que no ha podido ser permeado por el síndrome de la violencia  a pesar de lo contagioso del mismo a nivel nacional.

Eso no quiere decir que mi pensamiento crítico tenga que estar silencioso, no, para eso cree este espacio de opinión para poder plasmar mi pensamiento a cerca de las  situaciones sin importar el matiz y que puedan ser de interés para los Caimiteros.  Tengo todo el derecho  de expresarme sin entrar en ataque personales ni caprichosos contra alguien en particular o institución alguna sin motivos ni evidencias.

Se que a través de las redes sociales y quienes visitan el ciber espacio se consigue todo tipo de gente, los hay con niveles más altos de educación y entendimiento, otros con menos, los hay radicales,  extremistas y hasta  antisociales que incluso no conocen las reglas para poder escribir en la redes sociales o en el mundo de la Internet.

Remembranzas de Caimito

Se afirma que recordar es vivir, y por supuesto esto es más saludable que transarse en discusiones improductivas que lo único que hacen es quitarnos la paz que tanto necesitamos por estos tiempos.

Para muchos Caimiteros que han dejado la tierrita su diario vivir se desarrolla en medio de una selva de cemento donde somos presa fácil del estrés que por estos días se ha convertido en la enfermedad de moda y causante de muchos males; me he tomado el trabajo de recordar varias vivencias y situaciones cuyo escenario es Caimito y que fueron grabadas en la mente durante nuestra infancia. Para  los jóvenes de este siglo que se han criado en Caimito posiblemente mi escrito le parezca muy «cursi» pero se que a mis contemporáneos les sirvirá de antídoto momentáneo contra esta peligrosa enfermedad del siglo XXI.

Reflexion de un Caimitero

Por Miguel Viloria:

Ante la publicación en la Columna de opinión de este blog acerca de la Decadencia de Caimito; el paisano de nombre Miguel Viloria hace dos reflexiones bien importantes acerca de la decadencia de Caimito y el letargo al que esta sumido este municipio;  situación que me motiva a publicar dicho comentario como una nueva entrada en  este blog en la  Columna de Opinión. Resalto que no conozco al señor Viloria y lo aquí publicado es estrictamente los que el escribió en su comentario y corresponde a su pensamiento, salvo algunas correcciones ortográficas que le hice.

Comentario:

Es bueno, de hecho me alegra que hayan personas con iniciativas en busca de despertar y abrirle la mente al pueblo Caimitero; si bien no es mucho pero son los primeros pasos y por algo hay que empezar.

Por otro lado, es posible que los caimiteros se hayan quedado quietos, en una actitud que quizás determinó el estado actual de la situación que presenta este municipio un poco golpeado por la pobreza; ello se debe en cierta y gran parte a sus dirigentes; personas en las cuales este pueblo puso su esperanza pero que estos solo hicieron todo para su propio beneficio y no para el bien común que fue el pensamiento con el que fueron elegidos. Mi pueblo, a pesar de ser un poco manso, haciendo referencia a lo que decía Oscar, también tiene personas que pueden hacer un alto en el camino y romper con ese conformismo que les ha llevado incluso a no denunciar los malos procederes de aquellos que dentro de su territorio tienen el poder, esto son los alcaldes y demás, que si miramos la historia solo se han caracterizado por echar una que otra volquetada de arena en ciertas calles y otros que solo mejoraron los lugares por donde ellos viven o vivían. Es hora de despertar de ese letargo;  se necesita sangre nueva, sangre sin mañas, en lo referente a la política para regir los destinos de este pueblo y así mejorar las condiciones de vida de los conciudadanos.

¿ Es el «Statu Quo» opción de Vida en Caimito?.

En mi condición de nativo del pueblo de Caimito y preocupado de ver la forma como día tras día las condiciones de vida de los Caimiteros se degrada  e igualmente sus condiciones económicas y las estructuras sociales se socavan debido a la fuertes corrientes  silenciosas y subterráneas de la politiquería y el beneficio personal de algunos que todo lo arrasa a su paso, decidí  plasmar la idea de generar un sitio donde se pudiese en primer lugar dar a conocer al Municipio de Caimito en el mundo,  en segundo lugar que sirviese de sitio noticioso del municipio y de tribuna abierta a quienes quisiesen  informar, apoyar eventos y situaciones admirables sobre Caimito.

Utilizando mis precarios conocimientos de sistemas y mis escasos conocimientos como escritor me lancé a estructurar este sitio en la web con  un espacio para expresar  opiniones y temas que afecten positiva o negativamente a los Caimiteros y es así como surge esta  columna de opinión, que no solo pretende plasmar mis opiniones  sino las de todos  aquellos que quiera expresarse a través de este medio o generar conciencia de algo.

Con el agua hasta el cuello.

Ante la nueva ola invernal producto del fenómeno de la niña, Caimito entra a la larga lista de municipios afectados donde las familias lo han perdido todo sin importar su condición. La verdad es que no solamente en esta temporada están siendo afectados los caimitero, sino que desde hace mucho tiempo vienen padeciendo esta situación ante la mirada indiferente de las autoridades Municipales, Departamentales y Nacionales; si no es así, pregúntenle a los habitantes del Mamón que viven la mayor parte del año con el agua al cuello y hoy ya están inundados, pero su condición y necesidades no trascienden ante la opinión Publica.

  

Nadie se ocupa de la situación de estas personas quienes en unos tambos pasan la temporada de lluvias y aumento de los niveles del río San Jorge durante casi 8 meses del año si acaso no es más, pues esta vez se unió la ola invernal del 2010 con la del 2011, quiere decir que tienen alrededor ocho meses bajo el agua sin vislumbrar una solución a esa problemática.

La decadencia de Caimito

Este bello pueblo situado a las orillas de la Ciénega de su mismo nombre  bordeada por el río San Jorge, con una posición geográfica propicia para el desarrollo agrícola y pecuario dado la fertilidad de sus tierras y la riqueza ictiológica de sus ciénagas.

Otrora Caimito tenía un gran comercio fluvial y era puerto de llegada de grandes embarcaciones comerciales a lo largo del San Jorge y Magdalena. Ganadero por excelencia, posteriormente se destacó por la pesca la cual también sucumbió ante las crecientes que han sobrevenidos y el mal uso de los criaderos y elementos de pesca utilizados.